Don José era un anciano muy jovial de la casa hogar, tenía Alzheirmer , pero no tan avanzado y Parkinsons, siempre que me veía, movía sus manos y sus ojos me miraban con alegría.
Le veía, muy esforzado, le gustaba que le diera masajes en sus brazos, y manos, con una cremita olorosa que les llevaba, él hacía lo posible y lo lograba, comer con sus manos un tanto temblorosas.
Un día Don José al probar un bocado de su comida, comenzó a toser, se estaba ahogando, entonces, corrí a darle golpecitos por la espalda. Cuando ya paso su tos, me pregunto, con su voz pausada, ¿quién le enseño a ser tan generosa, su familia es así como usted?, le respondí, si, un tanto asombrada.
Don José cuando me veía, movía sus manos, de ahí, que al llegar al salón donde se reunían para luego almorzar, le cantaba la canción de pajaritos a volar, diciéndole: pajaritos a volar, lararalala, plaplaspala, pla, pues inventándole porque no me la sabía muy bien, entonces él sonreía y agitaba sus manos.
Tenía un mes que no iba al Hogar, debido a un problema con mi automovil.El miércoles pasado regrese, pregunte por él y me dijeron que estaba en cama, con una infección renal, llegue a su habitación pero lo vi dormido, al rato, después de ayudar en el almuerzo con los ancianos, me dirigí a su habitación con el enfermero que le daría su alimento, Don José no respondía al llamado para almorzar, entonces le cante la canción de pajaritos a volar, y enseguida abrió los ojos ,y sonriendo movió sus manos, me dio tanta alegría.
Hoy llegue al Hogar y pregunte por Don José, me dijeron que ya no estaba, mientras Isabel explicaba lo sucedido, mis ojos se llenaban de lágrimas.
Cuando daba de comer a un anciano, en el mismo lugar donde se colocaba Don José en su silla de ruedas, pensé por aquí estas Don José, te siento en este lugar, se que estas aquí acompañándonos. Es triste verlos partir, les aseguro.
Como duele la desaparición física, de seres amados, a pesar de entender el universo de estrellas, el multiverso sagrado, como su próxima morada.
Un día Don José al probar un bocado de su comida, comenzó a toser, se estaba ahogando, entonces, corrí a darle golpecitos por la espalda. Cuando ya paso su tos, me pregunto, con su voz pausada, ¿quién le enseño a ser tan generosa, su familia es así como usted?, le respondí, si, un tanto asombrada.
Don José cuando me veía, movía sus manos, de ahí, que al llegar al salón donde se reunían para luego almorzar, le cantaba la canción de pajaritos a volar, diciéndole: pajaritos a volar, lararalala, plaplaspala, pla, pues inventándole porque no me la sabía muy bien, entonces él sonreía y agitaba sus manos.
Tenía un mes que no iba al Hogar, debido a un problema con mi automovil.El miércoles pasado regrese, pregunte por él y me dijeron que estaba en cama, con una infección renal, llegue a su habitación pero lo vi dormido, al rato, después de ayudar en el almuerzo con los ancianos, me dirigí a su habitación con el enfermero que le daría su alimento, Don José no respondía al llamado para almorzar, entonces le cante la canción de pajaritos a volar, y enseguida abrió los ojos ,y sonriendo movió sus manos, me dio tanta alegría.
Hoy llegue al Hogar y pregunte por Don José, me dijeron que ya no estaba, mientras Isabel explicaba lo sucedido, mis ojos se llenaban de lágrimas.
Cuando daba de comer a un anciano, en el mismo lugar donde se colocaba Don José en su silla de ruedas, pensé por aquí estas Don José, te siento en este lugar, se que estas aquí acompañándonos. Es triste verlos partir, les aseguro.
Como duele la desaparición física, de seres amados, a pesar de entender el universo de estrellas, el multiverso sagrado, como su próxima morada.
Les dejo el link de pajaritos a volar.
http://www.youtube.com/watch?v=mietdR8OHzE&feature=PlayList&p=FEA688D957611219&index=0&playnext=1
Lis
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